Recordad siempre que debéis aislar la contracción del aductor apretando la almohada antes de ejecutar la inclinación pélvica, flexionando luego la barbilla hacia el cuello, la nariz hacia el esternón y la frente hacia el abdomen.
Posición No 1 (Recto abdominal). Elevaos en una dirección hacia el frente, flexionando la mitad del cuerpo (como si fuerais a colocar la cabeza entre las piernas). Si sentís tensión en la espalda baja o cualquier arqueo o presión en la espina dorsal que está contra el suelo es porque estáis haciendo el ejercicio incorrectamente.
Se trata de indicaciones de que los músculos de la espalda baja son los dominantes. No apretéis los glúteos. Los individuos que sientan esos dolores deben consultar a un médico, quiropráctico o fisioterapeuta respecto al uso del aparato llamado «Invertabod», una máquina de flexión invertida que permite un estiramiento dinámico o completo de los músculos extensores, incluyendo los sacroespinales, glúteo mayor y femorales.
Posición No 2. Las rodillas se doblan en ángulo de 45 grados con los pies planos sobre el suelo.
Posición No 3. Las piernas se apoyan sobre un banco o silla.
En la segunda y tercera posición debe colocarse una almohada entre la parte interna superior de los muslos, y hay que contraer simultáneamente los abdominales y los aductores.
Posición No 1 (Recto abdominal). Elevaos en una dirección hacia el frente, flexionando la mitad del cuerpo (como si fuerais a colocar la cabeza entre las piernas). Si sentís tensión en la espalda baja o cualquier arqueo o presión en la espina dorsal que está contra el suelo es porque estáis haciendo el ejercicio incorrectamente.
Se trata de indicaciones de que los músculos de la espalda baja son los dominantes. No apretéis los glúteos. Los individuos que sientan esos dolores deben consultar a un médico, quiropráctico o fisioterapeuta respecto al uso del aparato llamado «Invertabod», una máquina de flexión invertida que permite un estiramiento dinámico o completo de los músculos extensores, incluyendo los sacroespinales, glúteo mayor y femorales.
Posición No 2. Las rodillas se doblan en ángulo de 45 grados con los pies planos sobre el suelo.
Posición No 3. Las piernas se apoyan sobre un banco o silla.
En la segunda y tercera posición debe colocarse una almohada entre la parte interna superior de los muslos, y hay que contraer simultáneamente los abdominales y los aductores.